sábado, 9 de enero de 2010

A dos centimetros de ti


A dos centímetros de tu cara es donde puedo apreciar el olor de tu cuello como nadie lo ha hecho. A dos centímetros de tus ojos veo verdades como puños en la luz de tu mirar. Y siento tu aliento que tan terriblemente se parece al mío, ¿por qué será? Será que nuestras bocas no respetan ni la más mínima distancia para estar una junto a la otra? Será que tu lengua necesita entrecruzarse con la mía para así saciar una sed que poco nos ahoga y por lo menos a mí, me consume. Sera que necesito verte desnuda y abrazarte para comprobar que eres mía, será mi cuerpo que siente envidia de mis manos cuando el resto anda vestido. Será el camino el que nos juntó. Y los dos centímetros siguen queriéndonos separar. Por suerte nunca me doy por vencido y ya que no tengo ni Dios ni amo que guíe, dejo a mi mano señora de mi destino, con la que te acerco a mi reduciendo esa distancia cada vez más, hasta que se convierte en menos y de ese menos a la nada hay un paso… o un bocado.

3 comentarios:

  1. Lo se, te pongo... qué se le va a hacer? :P

    X eso te sientas en clase conmigo, xk no te puedes separar ni 2 cm...

    jajajaja...

    ay juanka...

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  2. Pues sigue mordiendo, que seguro que se deja :)

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